Parece fácil pero no lo es.
A menudo nos quejamos de lo que no tenemos, de lo que no podemos hacer y de lo que no somos y pocas veces nos damos cuenta de todo lo que tenemos, de todo lo que hacemos y de todo lo que somos.
Ha llegado el momento de hacer balance y valorar las cosas que hemos conseguido en nuestra vida, de las personas que están a nuestro lado y que nos quieren un montón.
Tenemos que pararnos a pensar que somos la leche y sabemos hacer un montón de cosas chulas y super importantes.
Y aprender a ver que somos estupendos y maravillosos y que nos lo merecemos todo, todito, todo porque nos lo hemos currado.
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